Si tienes que preparar los pasabocas con antelación, no puedes olvidar cubrir el pan con una ligera capa de mantequilla para que lo haga impermeable a la humedad de la guarnición y dejarlos, ya colocados en la bandeja, en la nevera. Eso sí, es imprescindible que los dejes cubiertos con el clásico plástico de cocina para que frío no los deshidrate y se resequen.