Sea cual sea el tipo de aperitivo que desees poner, no olvides la presentación. Los rabanitos dan mucho juego a la hora de decorar una bandeja con pasabocas. Si quieres que se abran como si fueran flores, límpialos y hazles en la base una pequeña incisión en forma de cruz. Luego, ponlos en agua con unos cubitos de hielo.
Si quieres hacer tú misma un exquisito paté al oporto o al jerez, no tienes nada más que añadir a un paté en conserva un chorrito de cualquiera de estos vinos. Luego, debes batirlo muy bien con un poquito de mantequilla y dejarlo enfriar en la nevera. Sírvelo en rebanadas pequeñas de pan tostado.
No te dañes las uñas intentando pelar las almendras. Es mejor que las sumerjas en agua hirviendo durante un par de minutos y, luego, las pongas bajo el chorro de agua fría. La piel saldrá sin ninguna dificultad.
Para hacer un plato dulce de arroz, como por ejemplo el arroz con leche, primero debes cocerlo durante cinco minutos en agua y después, finalizar la cocción con leche. Quedará bastante más jugoso.
Si prefieres una entrada caliente, los calamares a la romana, quedarán muy tiernos si los cueces unos minutos antes de freírlos. Para que estén más jugosos, echa un poquito de maicena en el aceite.
Si tienes que preparar los pasabocas con antelación, no puedes olvidar cubrir el pan con una ligera capa de mantequilla para que lo haga impermeable a la humedad de la guarnición y dejarlos, ya colocados en la bandeja, en la nevera. Eso sí, es imprescindible que los dejes cubiertos con el clásico plástico de cocina para que frío no los deshidrate y se resequen.
Lo conseguirás si sigues los siguientes consejos: échalo primero en un colador y pasa el arroz por abundante agua fría para eliminar los restos de almidón. Luego, echa el arroz a la olla cuando el agua ya esté hirviendo; no lo remuevas más de lo indispensable y por último añade un chorrito de aceite para que quede más suelto.
¿Te gustaría salir de los pasabocas clásicos y ofrecer a tus invitados otro muy personal? Primero, toma una taza de aceitunas, escúrrelas bien de restos de agua y mézclalas con un poco de aceite de oliva. Espolvorea con tomillo y un poquito de romero y ¡a disfrutar!
No pongas los pasabocas directamente sobre bandeja, quedan mucho más elegantes colocando entre ambos una simple blonda de papel que, por supuesto, también puedes hacer tú, realizando los calados que mas te gusten.
Cuando vayas a cocinar arroz, recuerda que, para que no quede aguado, sólo debes echar dos tazas de agua por cada una de arroz.
